Llevaba tiempo queriendo hacer algo para la pequeña Laura, la hija de unos amigos, aprovechando retales que tenía por casa de un regalo anterior (una funda de eBook). Buscaba algo sencillo y que no fuera el típico peluche-muñeco ñoño... y salió este conejillo. No es más grande que un folio y está todo cosido a mano, de ahí que sea tan asimétrico (el tiempo dirá también si está hecho a prueba de niños).
Laura tiene criterio propio y de primeras no le gustó mucho, prefería que se lo quedase su padre. Al día siguiente cambió de opinión, ya lo llevaba en el carrito y tenía hasta nombre: ¡Rabbit!
Rabbit esta presente en todos los juegos de Laura y de momento está a prueba de niños y te advierto que lo está probando a conciencia.
ResponderEliminarGracias!!
El padre de Laura